Uriginal

Uri Martínez (L’Hospitalet de Llobregat, 1983), conocido como Uriginal, es un artista urbano que destaca por su estilo colorido que mezcla la herencia mosaica de Gaudí con el arte pop y folclórico. Uriginal intervino muros de la periferia de Barcelona con pioneros como Xupet Negre y Pez. Sus obras combinan elementos modernos con clásicos. Uriginal utiliza la geometría para cuestionar el canon occidental de retrato, dando así una nueva vida y perspectiva a los personajes que representa. Ha expuesto en numerosas galerías, desde Denver y Miami, en París, Amsterdam y Singapur. Uriginal ha formado parte del equipo de Rebobinart en varias ocasiones, como por ejemplo con su creación por el edificio de Livensa Living Studios situado en Alcobendas o su intervención en los muros de la antigua prisión de Barcelona, ​​La Model.

Desde joven, has trabajado en diferentes medios artísticos que te han permitido participar en exposiciones en Barcelona, Denver, Miami, Madrid, Montreal y Amsterdam, entre otras, así como intervenir espacios externos en diferentes ciudades. ¿Qué dirías que te ha aportado tu trabajo en el espacio público?

Pues no lo sé. En realidad, empecé de chaval a pintar en el espacio público sin permiso y lo que me ha aportado más es el diálogo entre el espacio público -que me da la libertad- y el espacio privado -en el que mantengo una lucha técnica conmigo mismo de querer mejorar a nivel: “uso un pincelito más fino”, todo está más detallado, prestas más atención a la pintura, cubres mejor, usas las capas necesarias para que quede perfecto…-. Cuando trabajas en el espacio público ilegal, tienes un poquito menos en cuenta todo esto; haces que los fallos de la pared también participen, que se vea más vivo. En cambio, en un cuadro me parece más trabajo de taller.

Y el diálogo entre las dos es lo que a mí me nutre.

La evolución de tu estilo pictórico y tu técnica parece irse desplegando cada vez más hacia la experimentación y la deconstrucción de formas que en un primer momento eran realistas. ¿qué crees que ha influido en esta evolución? ¿Cuáles son tus referentes estéticos (no solo pictóricos, también literarios, musicales, cinematográficos) y conceptuales?

“Bua”, de referentes estéticos o conceptuales en realidad no tengo ni puta idea. Como en mi cerebro a veces tengo trastorno obsesivo compulsivo, pues me puede dar ahí un ataque de nutrición de color en una tienda de bambas super aséptica, en un mercadillo, o puedo estar viendo un museo o, yo que sé, viendo como alguien está delinquiendo y puedo encontrar belleza o algún sentimiento estético que luego quiero llevar a un cuadro, a un brillo o a un reflejo, por ejemplo.

En los últimos meses, has realizado una intervención artística en Livensa Living Studios en Alcobendas (Madrid), producida por Rebobinart. Esta obra ocupaba 138 metros cuadrados de muro y consistía en un personaje femenino central que evocaba las figuras de Athena y Minerva. ¿Podrías explicar tu experiencia, retos o anécdotas de este trabajo en un formato de grandes dimensiones? ¿Deja este formato espacio para la improvisación?

La experiencia de pintar en la Livensa ha sido como un auto reto. Me ha gustado mucho lo de subir a una grúa que hacía tiempo que no lo hacía en una de esas dimensiones. Y lo de la improvisación, en realidad no he improvisado mucho porque precisamente me gusta eso: ceñirme al formato que he presentado. También porque me aligera un poco el peso de las voces dentro de mi cabeza.

El caso de Livensa es paradigmático de la presencia de figuras femeninas en tu obra – Antonia la Húngara, una infanta al estilo de Velázquez, Rosalía. ¿Crees que es importante dar visibilidad a todo un espectro de feminidades en el espacio público? A nivel político, ¿qué dirías que puede disparar en la ciudadanía esta presencia? (Reflexión, crítica, contemplación…)

Claro que es importante dar visibilidad, pero no sé en qué puede disparar esta misma presencia en la ciudadanía. Me imagino que en tener referentes. Yo solo pretendía mostrar la figura de una joven que lleva en sí el espíritu de una lucha y no sé si esta presencia puede cambiar algo, pero me imagino que tener referentes de gran tamaño de mujeres en esta actitud siempre será positivo, no sé.

A parte de incorporar figuras contemporáneas como Rosalía, Carmen Amaya, Kanye West o Andy Warhol; encontramos en tu obra un desentierro de elementos del pasado más lejano y de la historia del siglo XX. ¿Qué papel puede tener el arte urbano en la recuperación de la memoria histórica o de barrio?

Pues a lo mejor es al revés, ¿qué papel puede tener la representación de la memoria histórica o de barrio en el arte urbano? No sé de dónde encuentro elementos de un siglo, de otro… En realidad, no veo los siglos a las cosas, las veo según si me emocionan o no. Y lo de la memoria histórica y de barrio me imagino que viene más de la educación, de cómo está la persona. O sea, el arte al final es solo pintura y para que sea arte hace falta la persona que le mira. Y la persona que le mire es la importante y es la que ella decide. Y si no tiene una educación o una sensibilidad o está más pendiente de otras cosas, poco va a ser. Si la persona tiene que ganar 800 euros para alimentar a sus hijos, pero gana 400, no sé en qué puedo ayudarle yo pintando una figura femenina, por ejemplo.

Durante tu trayectoria, has realizado colaboraciones con artistas como Irene López León, Deih and Slomo, Enric Sant, ILL, Cinta Vidal, Kenor, Saturno, Flan, o Pez. ¿Cómo modifican estas colaboraciones tu proceso creativo? ¿Qué crees que os aportan recíprocamente estos trabajos conjuntos?

Los trabajos conjuntos te ayudan, pues, a salir de ti, a tener como un fin conjunto, a experimentar contra ti mismo un poco, a meterte en los adentros de otra persona y que otra persona se meta dentro de ti. Bueno, es hacer el amor, pero es un tipo de relación extraña con las personas.

Por último, nos gustaría adentrarnos en Polygon Minds. Este proyecto a largo plazo pretendía experimentar la luz y el color con textura, y su comportamiento en diferentes superficies dentro y fuera del estudio. ¿Sigue en marcha esta experimentación? ¿Tienes algún otro proyecto entre manos que te gustaría contarnos?

Lo de la experimentación y todo eso, no sé. Eh, sí. Le llamo vida. Cada día me levanto y los impulsos y voces de la cabeza es como que me dictan lo que yo tengo que hacer.